Cuidar tu boca, dientes y encías de forma natural te proporcionar mejores resultados que los de los métodos convencionales. El proceso de curación será más lento, pero el resultado más satisfactorio. Maltratamos a nuestros dientes al hacerlos rechinar, además de comer con ellos comidas con azúcar, especias o grasas. Para entender las enfermedades de las encías, imaginad los dientes enraizados en el hueso, igual que las plantas tienen sus raíces ocultas. Si la tierra que aguanta a una planta se erosiona, perderá estabilidad o se secará. Con los dientes pasa lo mismo: pueden llegar a caerse.
La primera fase es la de la gingivitis, una inflamación de las encías. La placa dental proviene de la comida que ingerimos y de las bacterias que viven en la boca. Debe ser eliminada cada día mediante un uso adecuado de las técnicas domésticas de cuidado. Si no se hace, se acumula y se convierte en sarro, que además de contener toxinas, es un irritante. El sarro solo puede ser eliminado por vuestro dentista o especialista dental usando instrumentos manuales. El cuidado de una sonrisa bonita y saludable no solo implica la educación del paciente, sino también su motivación para el cuidado dental en casa. Es importante trabajar manualmente: muchas clínicas dentales usan máquinas para conseguir resultados rápidos, pero olvidan el cuidado terapéutico. Cuando un paciente entra en mi sala, ya está preparada con aromaterapia para rebajar el nivel de estrás y ansiedad.
La primera visita a un centro de higiene dental holística empieza educando sobre hábitos de higiene oral, trabajando con instrumentos manuales y usando aceites esenciales y enjuagues de hierbas para conseguir un resultado tan indoloro como sea posible y un enfoque más amable a una visita al higienista. Cada paciente es tratado en función del caso, por ejemplo con los enjuagues bucales. El tomillo es un desinfectante natural para equilibrar nuestro PH con efecto balsámico. El agua de rosas contiene mucha vitamina C para reforzar los tejidos de las encías. Se puede preparar en forma de té para enjuague. El aceite esencial de romero sirve para cuidar y regenerar las encías, asá que con las enseñanzas adecuadas las encías en retroceso pueden ser curadas. Cuando uso un instrumento manual, lo mojo en aceite de clavo, que actúa como una anestesia natural. Al finalizar, hago un masaje facial con aceites esenciales, dejándolo así relajado y con pensamientos positivos.
La clave para conseguir unos dientes y encías sanos es que vuestro especialista dental sepa transmitir una actitud positiva hacia los hábitos de higiene oral. Recordad que vuestra boca forma parte de vuestro cuerpo, lo ideal es conseguir tener salud en todo vuestro organismo. Si tenéis alguna duda, no dudáis en hacérmelo saber.